jueves, 18 de febrero de 2010

COMO HABLAR A TIEMPO?


Hay tiempo para todo.

Eclesiastés 3:7 dice que hay tiempo de callar y tiempo de hablar, es decir que tenemos un tiempo para todo.

Es muy triste y de mal gusto cuando proferimos palabra fuera del tiempo Prov. 29:20 dice “¿Has visto hombre ligero en sus palabras? Más esperanza hay del necio que de él”. Cuando hablamos de maas, nos trae muchas calamidades porque decimos cosas que no tenemos que decir y luego queremos dar marcha atrás y ya no se puede, dañamos personas por hablar cosas fuera de tiempo; por eso es de suma importancia que nos frenemos la boca y pensemos muy bien las palabras que vamos hablar. Prov. 15:23 dice “El hombre se alegra con la respuesta de su boca; y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es!”. Que lindo es cuando podemos edificar con nuestra palabra, pero cuan malo es cuando por decir cosa fuera de tiempo dañamos a nuestro prójimo. Tengamos cuidado cuando vayamos a decir palabra, la Biblia dice que hay dos cosas que no se pueden devolver la piedra cuando se tira, ni la palabra cuando se dice; todos hemos pasado por grandes angustias cuando hemos dicho palabra fuera de su tiempo, porque luego nos queda el dolor, pero ya no hay marcha atrás.

jueves, 31 de diciembre de 2009

LA HIGIENE EN EL CRISTIANO


Para esta semana, traemos un consejo interesante sobre la higiene del Cristiano y lo que enseña la Biblia sobre la higiene.

La enseñanza más importante sobre la higiene o el aseo personal en la Biblia aparece en los capítulos 11 a 15 de Levítico. Algunas de las reglas nos pueden parecer extrañas y severas. Sin embargo, nuestra comprensión moderna de cómo se transmiten muchas enfermedades nos muestra que muchas de esas reglas tenían sentido.

Leamos Levítico 11:32-40 “Y todo aquello sobre que cayere algo de ellos después de muertos, será inmundo; sea cosa de madera, vestido, piel, saco, sea cualquier instrumento con que se trabaja, será metido en agua, y quedará inmundo hasta la noche; entonces quedará limpio. Toda vasija de barro dentro de la cual cayere alguno de ellos será inmunda, así como todo lo que estuviere en ella, y quebraréis la vasija. Todo alimento que se come, sobre el cual cayere el agua de tales vasijas, será inmundo; y toda bebida que hubiere en esas vasijas será inmunda. Todo aquello sobre que cayere algo del cadáver de ellos será inmundo; el horno u hornillos se derribarán; son inmundos, y por inmundos los tendréis. Con todo, la fuente y la cisterna donde se recogen aguas serán limpias; mas lo que hubiere tocado en los cadáveres será inmundo. Y si cayere algo de los cadáveres sobre alguna semilla que se haya de sembrar, será limpia. Mas si se hubiere puesto agua en la semilla, y cayere algo de los cadáveres sobre ella, la tendréis por inmunda. Y si algún animal que tuviereis para comer muriere, el que tocare su cadáver será inmundo hasta la noche. Y el que comiere del cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche; asimismo el que sacare el cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche. ”.

Levítico 13:29-59, también habla del que tuviere llaga o tiña en el cuerpo, habla de la forma en que este se conduciría, preservando la salud de los demás.

Por su parte, Levítico 15:1-15, habla sobre el flujo seminal y del rito de su purificación.

A menudo se enfatiza aquí la necesidad de lavar y aislar a la persona para evitar que la infección se extienda. Aun hoy quizás resulte difícil distinguir entre diferentes clases de infección. Una buena higiene es muy importante para impedir que la infección se extienda. La transmisión de enfermedades como el SIDA y la hepatitis por medio de la sangre y otros fluidos corporales nos muestra claramente la necesidad de tener mucho cuidado.

En Romanos 12:1 Pablo nos exhorta a presentar nuestros cuerpos como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.

¿Qué tipo de cuerpo le ofrecemos si vivimos para él? No siempre podemos evitar la enfermedad, pero ¿estamos usando de la mejor manera posible nuestros recursos físicos y espirituales? ¿Nuestra higiene deficiente pone en peligro a otras personas? ¿Es ésta una buena actitud cristiana?.

Las leyes dietéticas que Dios dictó para su pueblo, tenían como propósito mantener la limpieza e higiene dentro del campamento, es por eso que les ordenaba usar una estaca cuando fueran a defecar para enterrar las materias fecales, bajo la egida de que el campamento de Jehová tenia que ser santo. Cuando Dios utiliza esa expresión, de que tenia que ser santo, quería destacar que el campamento de Jehová tenia que ser limpio e higiénico. Eso nos enseña a tomar en cuenta las siguientes medidas de higiene:

• Mantener una higiene personal en nuestro cuerpo, bañándonos constantemente y usando desodorante, colonias, polvos o perfumes adecuados. Incluyendo las axilas, el cabello, la higiene intima y la higiene bucal.

• Depilarse o afeitarse constante y adecuadamente, tanto la mujer como el hombre, en diferentes partes del cuerpo. No se preocupe, no esta pecando con eso, simplemente es una medida de higiene personal. En cuanto al hombre, siempre afeitadito y recortadito.

• Mantener limpio el lugar en donde frecuentamos, ya sea en la casa, el trabajo o cualquier lugar. Si el lugar en donde hacemos vida normal esta sucio, así mismo estamos nosotros.

• Ser responsables de los baños que utilizamos para hacer nuestra necesidades fisiológicas, descargar el retrete o buscar agua si el tanque no tiene; así como secar el piso y no dejarlo mojado.

• No arrojar basuras en las calles, el piso o cualquier lugar; hay que procurar conseguir el zafacón mas cercano. Si es una menta, es mejor guardar la envoltura en el bolsillo o la cartera, hasta encontrar el lugar adecuado para arrojarlo. Si alguien acostumbra a arrojar basura por la ventanilla del carro o autobús, sepa que esta faltando a la higiene publica.

• Si esta enfermo debe cuidar la salud de los demás. Si es un resfriado, use toalla o pañuelo limpio y trate de no dar las manos al saludar a los demás y obtenerse de abrazos, pues puede contagiar a otros. piense en la regla de oro.

En fin, el criterio de la higiene en el cristiano no es algo ajeno a las Sagradas Escrituras. Dios quiere que seamos limpios, tanto por dentro como por fuera. Recuerden que la Biblia dice que todo nuestro ser: espíritu, alma y cuerpo sean guardados irreprensibles. Además, Pablo también señala que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, y creo que el Espíritu Santo, que es lo mas sublime y puro, no morara en una gente sucia, anti higiénico y descuidado. ¿o acaso es coincidencia o simple antojo de Dios el exigirle a Aarón y sus hijos lavarse antes de entrar al tabernáculo de Reunión en Números 8:5?

NELSI CORDERO DE BALIO

HUID PUES DE LA FORNICACION

Ahora bien, lo que la Biblia dice en cuestiones sexuales no tiene la misma aceptación. Contrario a lo que muchos han sido inducidos a creer, la Biblia no afirma con pudor exagerado que todo deseo sexual sea pecaminoso. Pero sí ofrece buenos consejos sobre cómo debe expresarse la sexualidad humana. Enseña que las relaciones sexuales solo están permitidas dentro del matrimonio entre un hombre y una mujer (Génesis 2:24; Mateo 19:4-6; Hebreos 13:4), que la unión sexual de los cónyuges es una manera de expresarse el uno al otro amor y ternura (1 Corintios 7:1-5) y que a los niños que nacen de tal unión les beneficia tener un padre y una madre que se aman (Colosenses 3:18-21).


Tocante a las relaciones sexuales entre personas no casadas, la Biblia contiene este mandato: “Huyan de la fornicación” (1 Corintios 6:18). ¿Por qué? Una razón la tenemos en ese mismo versículo: “Todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo”. ¿Qué sucede cuando se pasa por alto lo que la Biblia dice sobre estos asuntos?

Veamos lo que está ocurriendo en Estados Unidos. En la actualidad, ese país tiene el mayor índice de adolescentes embarazadas del mundo industrializado: unas 850.000 cada año. Muchas de las jovencitas que no llegan a abortar dan a luz sin haberse casado. No puede negarse que hay adolescentes solteras que hacen todo lo posible por criar a sus hijos con amor y disciplina, y algunas tienen éxito. Pero la dura realidad es que los hijos de estas madres tienen más probabilidades de acabar en prisión, y las hijas, de convertirse también en madres adolescentes. Tras revisar las cifras de las últimas décadas, el investigador Robert Lerman escribió: “Es posible que la actual tendencia hacia las familias mono parentales haya contribuido a una mayor incidencia de otros problemas sociales, como índices más elevados de escolares que abandonan los estudios, jóvenes que abusan del alcohol y las drogas, adolescentes embarazadas, madres adolescentes y delincuencia juvenil”.

Las personas promiscuas también se exponen a graves problemas de salud, tanto físicos como mentales. Por ejemplo, la revista Pediatrics informa: “Los datos sugieren que los adolescentes sexualmente activos tienen más riesgo de depresión y suicidio”. Respecto a otros problemas de salud, la Asociación Americana de Salud Social declara: “Más de la mitad de todas las personas [de Estados Unidos] contraerán una enfermedad de transmisión sexual en algún momento de su vida”. ¡Cuánta angustia y sufrimiento podría evitarse si se siguieran los prácticos consejos que contiene la Biblia tocante al sexo!


NELSI CORDERO DE BALIO

miércoles, 21 de octubre de 2009

EL CRISTIANO DEBE SER PRUDENTE

LA PRUDENCIA Y EL CREYENTE

¿Qué es prudencia? Ciencia, cordura, sabiduría.

Todo cristiano debe tener prudencia ya que es una cualidad que agrada a Dios. En varias citas de la Biblia, la Palabra de Dios, nos habla acerca de hombres que fueron prudentes, tal es el caso de David, quien antes de ser rey, aunque ya había sido ungido por Samuel, fue mandado a llamar para tocar el arpa para el rey Saúl, el cual era atormentado por un espíritu de parte de Jehová; por lo que un criado dijo que conocía a un hijo de Isai con varias cualidades, dentro de ellas, prudente en sus palabras.

También, en 1ro. Reyes 4:29 dice que Jehová dio a Salomón sabiduría y prudencia en gran manera, un don que le permitió reinar con éxito a su pueblo.

La prudencia debe acompañarnos siempre en nuestro diario vivir, al hablar, al compartir con los demás, en nuestras relaciones diarias; tanto con los hermanos en la fe, como con los inconversos.
Acciones consideradas imprudentes:

En un hospital, donde hay personas muy delicadas de salud, orar o predicar muy fuerte es un acto de imprudencia, pues en esos lugares es imprescindible hacer silencio y manejarse con prudencia con las personas a quienes queramos ministrar, sin importar que nuestra intención sea buena.

Orar muy fuerte o hacer actividades en altas horas de la noche o muy temprano en la mañana; también es un acto de imprudencia; porque hay vecinos que necesitan tranquilidad y descansar. En los matutinos, a pesar de ser una actividad de beneficio espiritual, debemos entender que no todos estarán en la disposición de compartir en dicho matutino; por lo que también se debe ser prudente a la hora de orar o utilizar instrumentos para predicar a los congregados.

En la calle, debemos ser prudentes tanto como peatón, como también al manejar algún vehículo. Cuando irrespetamos el semáforo o cualquier otra señal de transito estamos actuando imprudentemente. El que anda en vehículo debe ceder el paso a los demás, debe manejar a la defensiva, respetar las señales de transito y no vocear o discutir con algún otro chofer, pues eso puede traerle problemas (hay quienes han fallecido en una riña formada por una discusión entre choferes).

En el supermercado podemos actuar imprudentemente cuando peleamos por un turno, hay que reclamar su derecho, pero con prudencia; si el otro insiste en violar su derecho, entonces debemos dejarle “la túnica”, como lo ordena Jesús.

Otra forma en la cual podemos actuar imprudentemente es cuando tomamos atribuciones que no nos corresponden; ya sea en nuestro trabajo secular, como en nuestro trabajo en la iglesia o cualquier ministerio. El actuar prudentemente también incluye respetar la atribución de cada quien: si usted es secretario, debe respetar la atribución del tesorero o del presidente y viceversa.

Al hablar. Con la lengua podemos cometer muchos actos de imprudencia, tales como: revelar el secreto profesional o sacramental (es aquel secreto que se le confía a un profesional o un ministro). Ni el medico, ni el abogado, ni el contador deben revelar los secretos de sus clientes. Ni el sacerdote, pastor, diacono o líder debe revelar el secreto de los miembros; eso es un acto de imprudencia. También se debe utilizar la prudencia al aconsejar o amonestar a otra persona; no toda la verdad se dice y algunas deben decirse pero con prudencia. También hay que tener cuidado al habla sobre otra persona, porque se puede convertir en un chisme. Proverbios 20:19 dice “el que anda en chismes descubre el secreto; No te entremetas, pues, con el suelto de lengua”.

Nuestro Señor Jesús nos dejó la parábola: no te sientes en el primer lugar.

Esta parábola dice: “Cuando fueres convidado por alguno a bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú esté convidado por él, y viniendo el que te convidó a ti y a él, te diga: Da lugar a éste; y entonces comiences con vergüenza a ocupar el último lugar. Mas cuando fueres convidado, ve y siéntate en el último lugar, para que cuando venga el que te convidó, te diga: Amigo, sube más arriba; entonces tendrás gloria delante de los que se sientan contigo a la mesa”.
Este es un ejemplo de prudencia. Hay gentes que entran a una actividad de sobresalido (agentao) sin invitación. O entran a una casa y se sientan sin invitarlo. Abren la nevera o entran a los aposentos sin recibir una invitación.
La Biblia nos aconseja en Proverbios 2:1-2: “Hijo mío, si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti, Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia. Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz”. Entonces el verso 5: “Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios”.

Entonces, el consejo que nos da la Biblia en esta entrega es que SEAMOS PERSONAS PRUDENTES.

lunes, 5 de octubre de 2009

SEA UN O UNA BUEN AMANTE

El consejo que nos da la Biblia va dirigido directamente a los casados y casadas, el mismo es que sea un buen amante con su cónyuge.
Es un tema que anteriormente no se ligaba al estudio bíblico por se considerado por muchos como un tema carnal; sin embargo, aquí lo trataremos conforme a la Palabra de Dios, tomando el consejo que la misma nos revela.
En una ocasión, un hermano, se estaba quejando de que su esposa no quería corresponderle como el quería en la intimidad, ella se negaba mucho; a lo cual, la esposa ripostó delante del pastor que los aconsejaba, diciéndoles que el sexo solamente representa un 25 por ciento en la relación de pareja; y el esposo respondió: Si, pero si ese 25 no hay cien por ciento.
A veces creemos que la intimidad en la pareja no es importante, pero observamos que muchas de las infidelidades son provocadas por la insatisfacción sexual de uno de los cónyuges, principalmente con la mujer.
Hay una gran cantidad de parejas que carecen de una relación sexual satisfactoria. Mujeres que no saben o no quieren trabajar eficazmente a su marido; y maridos que no tienen ni la más remota idea de satisfacer sexualmente a su mujer.
Las mujeres son las más afectadas por la insatisfacción sexual, por la razón de que el hombre recibe un orgasmo rápidamente y con poco esfuerzo; no así las mujeres, las cuales son más complejas para poder recibir un orgasmo o un clímax.
El orgasmo es el momento de máxima excitación de los órganos sexuales en el que se experimenta un placer intenso y que va seguido de una relajación. El experimentar un orgasmo no es pecado, por el contrario es un disfrute de la relación misma; el orgasmo forma parte del ciclo de respuesta sexual del ser humano, de manera que es algo natural, Dios lo creo de esa forma.
Lo primero que la Biblia ordena y aconseja es que cada uno de los cónyuges cumplan con su deber conyugal (1 Corintios 7:3), claramente se refiere a la intimidad en la pareja. Además, el apóstol dice que ninguno de los dos (marido y mujer) tienen potestad sobre su propio cuerpo. En el verso 5 nos dice que ninguno de los dos debe negarse a cumplir con su deber sexual.
La Biblia también aconseja al hombre a que ame a su mujer y no seáis ásperos con ellas (Col 3:19), destacamos que no solo es en el trato diario sino también en su trato en la intimidad. Por ser ásperos en su relación sexual es que muchos hombres no pueden satisfacer sexualmente a su esposa. Las mujeres necesitan mas cariño que los hombres en todos los aspectos, principalmente en la intimidad; la sulamita dice en Cantar de los Cantares 1:2: “¡oh, si el me besara con besos de su boca! Porque mejores son tus amores que el vino”.
Para ser un buen amante hay que ser cariñoso y dedicado. Hacer y provocar las carisias dentro de la relación, principalmente que el preludio (se llama preludio a los actos preparatorios, que preceden al ayuntamiento carnal). Un buen preludio garantiza una buena y efectiva relación sexual. No existen carisias prohibidas en la intimidad matrimonial. Proverbios 5:15 dice: “Bebe el agua de tu misma cisterna, y los raudales de tu propio pozo… sean para ti solo y no para los extraños contigo, y alégrate con la mujer de tu juventud”. Esto nos señala que la relación sexual entre el matrimonio, no solamente es licita, sino también que Dios la ha creado para ser disfrutada al máximo. Salvo aquella relación contra la naturaleza, practicada en las relaciones homosexuales, condenada explícitamente en Romanos 1:26-27.
La Biblia habla sobre la negación en el acto sexual. Hay muchas mujeres que acostumbran a negarse a su marido. No hay una excusa, a través de la cual la mujer se niegue a darle la cuestión a su marido, solo el ciclo menstrual o una prescripción medica. Incluso, ni siquiera el cilicio (1 Corintios 7:4-5).
De manera que la Biblia nos ordena que cumplamos eficazmente con nuestro deber conyugal, que si contextualizamos podemos decir, que la Biblia nos ordena a ser un buen o buena amante.
Adelante hermano o hermana, cumple con tu deber. Hazle un buen trabajo a tu conyuge en la cama y disfruta de la relacion sexual entre ustedes dos.
En caso de que te sientas que no sabes como satisfacer a tu pareja, he aqui algunos consejos:
  • Provee un tratamiento cariñoso a tu pareja en todo momento de tu vida.
  • Manten una buena higiene siempre: Limpio (a), oloroso (a), rasurado (a), etc.
  • Realiza una buena sesion de caricias y besos con creatividad y delicadesa.
  • Aprende la anatomia de tu pareja, o sea, conoce sur organos y las zonas erogenas.
  • El hombre debe procurar satisfacer primero a la mujer hasta el climax.
  • Se creativo en cuanto a las posiciones cuando realizas el acto sexual.
  • Si no resulta nada, busca consejo de un terapeuta sexual cristiano.

Hilario Balio

miércoles, 9 de septiembre de 2009

UN CONSEJO BIBLICO SOBRE SER FIADOR O GARANTE?

SEGMENTO: CONSEJO BIBLICO PARA EL HOMBRE Y LA MUJER DE HOY.
El consejo de hoy tiene su contexto en la garantía, es decir, ser garante o fiador de alguien ¿Cuál es nuestro consejo?
Fianza o Garantia. Primero definamos ese termino: se llama Fianza o garantía a la obligación contraída en garantía de la deuda que tiene o contrae otra persona, de forma que si esa persona no paga, el fiador es quien tiene que pagar.
Usted puede ser fiador o garante, de manera personal, con una prenda o un titulo cualquiera, es decir que el ser fiador o garante de otra persona, es comprometerse a pagar la deuda de esa persona en caso que no pague la deuda.
El que sirve de garante o fiador debe interpretar la fianza de la siguiente manera: “yo me comprometo a pagar lo que otro va a disfrutar, en caso que esa persona no pague”. O sea, que cuando usted firma como garante o fiador esta diciendo, si el no paga, no se preocupen cóbrenme a mi, yo respondo si el no paga.
El libro de Proverbios nos advierte sobre el ser fiador, dándonos las consecuencias de servir de fiador o garante de alguien:
· SER FIADOR REPRESENTA UNA ATADURA. (Prov. 6:1-5). Al salir fiador es un compromiso espiritual. Asi que el que sirvió de fiador se coloco una atadura, por a partir de ese momento se convierte en dependiente del cumplimiento, la fidelidad, la puntualidad y el compromiso de la persona por quien se ha comprometido.
· SER FIADOR ES ESTAR DISPUESTO A LA ANSIEDAD. (Prov. 11:15). Las consecuencias de la fianza esta ligado fuertemente a lo emocional. La vida de la persona que usa la fianza, no tendrá tranquilidad emocional, porque si la persona que adquirió la deuda no paga, el acreedor busca al que se comprometió por el otro. De modo que en el momento que el deudor no pague, el diador o garante será presionado por los cobros, como el caso de la mujer viuda en 2 Reyes 4:2, que los acreedores de su marido muerto querían tomar sus hijos como esclavos.
· EL FIADOR CORRE RIESGO DE PERDER (Prov. 20:16). Todo el que salga fiador le corresponderá desembolsar para pagar la deuda, en el caso de que el deudor principal no pueda pagar o desaparezca. Es por eso que Salomon dice que el que es fiador es un tonto (Prov. 17:18).
Entonces, preguntamos ¿Por qué pagar deudas ajenas? Nuestro consejo va en consonancia con lo que dice Proverbios 22:26: “no seas de aquellos que se comprometen, ni de los que salen por fiadores de deudas”.
Hay muchos que han tenido que pagar deudas de otros: algunos han quedado mal sin quererlo, se metieron en un lio, que pensaron podían. Otros han quedado mal por deshonestos y sinvergüenzas; eso ha hecho que muchos pierdan dinero y hasta propiedades. Muchos pastores han sido victimas por ser garantes.
El consejo nuestro es: no sea garante, seale sincero a la persona que lo solicita como garante, y exprésele los motivos con sinceridad. Ahora bien, si cree que se puede ayudar a esa pesona, pídale mucha dirección a Dios sobre ser fiador, antes de proceder
ESTE HA SIDO EL CONSEJO BIBLICO PARA EL HOMBRE Y LA MUJER DE HOY.

SEA CUIDADOSO AL HABLAR, NO HABLE MUCHO


EN BOCA EN CERRADA NO ENTRAN MOSCAS

Un joven abogado, acabado de graduar del colegio de leyes y comenzando su primer día en el trabajo, se sentó en la comodidad de su nueva oficina dando un gran suspiro de satisfacción.Había trabajado duro por mucho tiempo para saborear ese momento.Entonces, notando un posible cliente que se acercaba a su puerta, comenzó a parecer ocupado y enérgico. Abrió su libreta tamaño legal y con su pluma de escribir en mano, tomó el teléfono, lo sujetó con su barbilla, y comenzó a escribir con rapidez mientas fingía que hablaba con alguien importante diciendo:-Mira Larry, en cuanto a ese trato de fusión, pienso que mejor me llego a la factoría y lo manejo de manera personal. Sí. No, No pienso que tres millones de dólares lo logren. Mejor hagamos que Smith, de Los Ángeles, se reúna con nosotros allí. Ok, Está bien. Te llamo más tarde.Colgando el teléfono, colocó la pluma en el escritorio, levantó la mirada a su visitante, se puso de pie, le extendió su mano y le dijo con la voz más cortés y llena de confianza que tenía como abogado:

-Buenos días. ¿Cómo puedo ayudarlo?El posible cliente respondió: -En realidad, solo estoy aquí para conectar su teléfono.Hay un viejo adagio que dice, “En boca cerrada, no entran moscas”. Es ocasiones lo mejor es, ¡mantener tu boca cerrada!

Proverbios 10:19 dice: En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente. Es decir que el hombre o la mujer parlanchina son susceptibles de ser imprudentes en cualquier momento de su vida. La mayoría de las veces es mejor guardar silencio.

Proverbios 13:3 tambien nos advierte sobre esto: El que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad. Un consejo importante, cuando estemos conversando con alguien es recomendable no hablar tanto de nosotros mismos, incluso a veces agregamos la frase: “la gloria sea para Dios”, lo cual es una muestra de que estamos hablando demasiado y sentimos que estamos tomando la gloria.

Proverbios 14:23 dice: En toda labor hay fruto; Mas las vanas palabras de los labios empobrecen. Mucha gente constantemente profieren palabras vanas, eso incluyen chistes y cuento de doble sentido. Además de contantes maldiciones a cualquier asunto o persona. Todos esos son palabras vanas, y lo que hacen es empobrecer y reducir nuestra calidad como personas.

Recordemos siempre: hay que ser prudente a la hora de hablar. Y nunca trate de polarizar una conversación hablando de usted o de sus hazañas, eso no es bueno.